Al menos 12 soldados del ejército norteamericano son acusados por guardarse miembros de los cuerpos de afganos asesinados durante la invasión.
Washington, 9 sep (PL) Al menos 12 soldados de Estados Unidos enfrentan hoy cargos por pertenecer a un supuesto equipo asesino secreto dedicado a matar civiles afganos, a quienes mutilaban para guardar sus miembros como trofeo.
Los efectivos ultimaron con armas de fuego o granadas en enero, febrero y mayo a tres civiles y luego se quedaron con partes de los cadáveres (dedos, huesos, dientes y un cráneo), reveló este jueves la edición digital del diario Seattle Times.
La denuncia del Ejército estadounidense notifica que cinco de los militares, Calvin Gibbs, Jeremy Morlock, Andrew Holmes, Michael Wagnon y Winfield Adam, tendrán que responder ante la Justicia por los horrendos crímenes.
Mientras, los otros siete soldados están acusados de encubrir los macabros hechos y de agredir a un recluta que informó sobre lo sucedido, entre otros abusos, incluidos el consumo de droga robada por parte de los miembros de su unidad.
El Army Times reportó también que al menos uno de los militares fue hallado con los dedos de las víctimas como recuerdo y que algunos de ellos posaron para los fotógrafos con los cuerpos.
Los implicados estaban destinados a una brigada de infantería Stryker con sede en la provincia de Kandahar, en el sur de la nación centroasiática.