Barcelona: implicado caso Palau de la Musica - Ademas del oficio de corrupto y delincuente, se hace pasar por minusvalido - Montull hace trampa para aparcar en zona de discapacitados

EL TRUCO. Montull se dirige ayer a su coche, estacionado en una plaza reservada para minusválidos, tras presentarse en el juzgado. Foto: RICARD CUGAT

La tarjeta que llevaba en el vehículo. Foto: RICARD CUGAT

RAMÓN TOMÁS / J. G. ALBALAT
BARCELONA

Pillado. Jordi Montull es uno de los dos saqueadores confesos del Palau de la Música, donde fue mano derecha de Fèlix Millet. Pero ayer cometió otra ilegalidad, esta vez administrativa: para cumplir con su cita mensual con el juez que instruye su caso, aparcó en una zona de discapacitados en la Ciutat de la Justícia usando de forma fraudulenta una tarjeta de un familiar que, además, está caducada desde el 18 de enero, según se podía ver en el salpicadero de su vehículo.

Tocaba firmar y soportar los flases durante una fugaz visita al juzgado y, como el mes pasado, hubo coincidencia de comparecientes ilustres por casos diferentes. Lluís Prenafeta, imputado por el caso Pretoria, fue de nuevo el primero, malhumorado e interpelando a los fotógrafos, con los brazos en jarra, si no tenían nada mejor que hacer. Poco después, a las 10.30 horas, apareció Montull. El excolaborador de Millet –el mismo que tres meses atrás fue fotografiado puliendo su drive en el club de tenis Pompeia– aparcó su Smart en la zona reservada para personas con minusvalía.

En Catalunya hay 424.086 personas que tienen un certificado de discapacidad y Montull no es una de ellas. Fuentes de la Conselleria d’Acció Social y Ciutadania confirmaron que Montull nunca ha solicitado la tarjeta de discapacidad. La adquisición de esta tarjeta requiere un grado de discapacidad mínimo del 33% y ofrece diversas ventajas.

Sí tiene la tarjeta una sobrina suya, a quien Montull, según fuentes de su entorno, suele acompañar en sus trayectos y a su recuperación. La tarjeta de la sobrina es de la modalidad de «titular no conductor», lo que permite a la persona que le hace de chófer usar los aparcamientos reservados. Pero ayer Montull se presentó en los juzgados sin acompañante, haciendo un uso fraudulento de la tarjeta y exponiéndose a una multa de 90 euros. Si hubiera estacionado en el párking de los juzgados, Montull habría pagado un euro.

Media hora más tarde llegó, sin ganas de hablar, el expresidente del Palau, Fèlix Millet, escudado por su abogado Jordi Pina. El letrado sí habló para calificar de justa la sentencia que considera el despido de Clara Millet, la hija de su cliente, improcedente y que condena al Palau a indemnizarla o a readmitirla. La entidad ha recurrido, pero entre tanto ha anunciado que volverá a emplearla para no abonar la indemnización. ¿Será en su antiguo puesto de directora internacional? Eso es aún una incógnita, aunque los abogados de la hija de Millet han advertido que denunciarán cualquier rebaja de su condición laboral.

Fuente: El Perodico 

PD: Vaya una clase politica que tenemos en España - Cataluña, mientras tantodespues de robar varios miles de millones de las antiguas ptas, siguen en la calle.

Y si a un ciudadano le pillan robando para comer una barra de pan, van a la carcel.

Esta es la justicia que tenemos en este pais de corruptos.