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Cuatro furgonetas de la Policía Nacional han pretendido tomar los datos de los indignados que han realizado una acción de protesta en una sede del banco Santander Central Hispano.
La acción protesta ha consistido en entrar a la sucursal y, de forma coordinada, desplomarse como si hubieran perdido el sentido. Luego, se ha procedido a la lectura del decálogo del movimiento 15M, Acampada Valencia. La protesta ha causado conmoción entre la gente que ha presenciado la performance.
A las 13:00, cuando los indignados regresaban a la plaza del Quince de Mayo, la Policía Nacional ha impedido a los indignados cruzar el paso de cebra de la esquina de la calle Correos con la Plaza con la intención de tomarles identificación. Enseguida, la noticia ha llegado a la plaza y se han movilizado al paso de cebra para apoyar a sus compañeros. Al final, la policía ha actuado de forma cívica y ha dejado correr el asunto, ante los aplausos, vítores y silbidos de cerca de un centenar de indignados.
Los indignados han regresado a la plaza con total normalidad y con cánticos alegres de “¡Ésta es nuestra plaza!”.