La invasión de Libia por parte de la llamada “coalición” se ha producido exactamente el mismo día en que se anunció el comienzo de la Guerra contra Irak por parte del Presidente G. Bush quien lo hizo a las 5:50 hora de Bagdah el 20 de marzo del 2003.
Como recuerda este artículo, la guerra en Irak comenzó y terminó en fechas importantes para el ocultismo y estuvo plagada de consideraciones y señales de lo oculto de principio a fin. Obviamente, la de Libia no será distinto porque es un calco de la anterior; un paso más en la agenda que pretende llevar al establecimiento del Nuevo Orden Mundial por parte de la cábala satanista que dirige el mundo en la actualidad, o al menos, buena parte de los acontecimientos que se suceden a diario por aquí habitualmente marcados por la angustia, la sangre y el estupor de los seres humanos. Sin duda, es ese uno de los objetivos más importantes.
Como la Guerra de Irak, que estuvo conducida estrictamente por consideraciones y números ocultistas, ésta de Libia, es el III Acto de la Guerra Global a la que quieren llevarnos. El segundo Acto fue la “misión humanitaria” en Afganistán.
El 20 de marzo de 2003 era un día importante para el ocultismo porque marcaba el comienzo del Equinoccio de Primavera (Ostara), exactamente igual que este año comienza el equinoccio de primavera el 20 de marzo (23:21 horas) de 2011. Más
En el marco de lo oculto, este ritual celebra la impregnación de la Madre Tierra y el “renacimiento”; ¿renacimiento de qué?. Seguro que no se trata de buenas cosechas de trigo y arroz.
El equinocio de invierno es un Rito de Fertilidad de Primavera copiado de los druidas satánicos cuyo significado más profundo es el de “renacimiento”. Se requiere un sacrificio de sangre, exactamente igual que el que menciona tantas veces la biblia cuando la sangre del cordero tiene que caer a la tierra. El Antiguo Testamento está plagadito de referencias a deidades que gustan más de la sangre que los vampiros. A eso, algunos lo llaman “Dios”.
Los satanistas y magos negros sacrifican también a sus animales y vierten su sangre sobre la tierra. Esta fecha es de especial importancia para los illuminati y, ¡oh qué casualidad!, tenemos que tanto la guerra de Irak, como la de Libia comienzan en tan importante fecha para los illuminati.
En este artículo que enlazo arriba se recuerdan además “coincidencias” como los 555 días pasados desde el 11 de setiembre del 2001 hasta el 20 de marzo del 2003 inicio de la Guerra en Irak. En este artículo de cuttingedge se trataba de mostrar que los illuminati organizaron los ataques del 11 de Setiembre como primera señal de la próxima futura aparición del Anticristo en la Tierra y las guerras sucesivas que se están llevando a cabo, con calculadora cabalística mediante, son pasos hacia tal presentación ante el gran público, evento que en mi opinión se plantea para el 21 del 12 del 2012.
Para los ocultistas, el “5″ es el Número de la Muerte y triplicar su intensidad con un 555 sólo significa lo que todos imaginamos: “Muerte al Más alto grado”. Esto encaja con la idea de que lo que pretenden es enviar esta actual civilización a la muerte para traer al Nuevo Orden Mundial y estrenar el cuaderno con páginas nuevitas y en blanco y sin renglones torcidos, instaurando el Reino del Anticristo.Todos hemos tenido esa tentación alguna vez amigos, me refiero la de tirar el cuaderno que va quedando feillo y sucillo y empezar con otro nuevo como si tal cosa. El tesón por mantener el gallinero en orden hay que reconocérselo, pero en fin, otra cosa es que digamos:
“Sí Wuana”. Va a ser que no…
Por si fuera poco, el artículo nos recuerda que el 20 de marzo era, según los astrólogos, el día de marzo con mayor influencia del planeta MARTE sobre la Tierra. En la mitología romana, Marte, en latín Mars, era el dios de la guerra. Sabemos muy bien que reyes de la antigüedad y de la actualidad, así como autoridades eclesiásticas del más alto nivel, emplean la astrología para decidir cuándo iniciar tal o cual acción o tomar una iniciativa importante. Esto se evidencia de forma constante en la numerología que está al alcance de cualquiera.
El mes de Marzo se denomina así en honor al planeta Marte, por lo que el ingreso de marte y el día de mayor fuerza de su influencia implica una mucha mejor disposición para la guerra.
El ultimátum previo que se dio de 48 horas a Sadam Hussein coincidió matemáticamente con la festividad del Purim de manera que el comienzo de la guerra de Irak estuvo claramente bajo consideraciones ocultistas y del calendario judío.
Lo mismo puede decirse de la fecha en la que se terminó oficialmente la guerra contra Irak el 1 de mayo de 2003. El 1 de mayo, conocido por muchos como el día de los trabajadores en todo el mundo, es en realidad una de las fechas satanistas más importantes conocida como Buenfuego (Beltane en irlandés), festividad que va del 30 de abril al 1 de mayo, noche también conocida como la de Walpurgis, el día más importante del Calendario Druida y de Brujos. Esta fecha es extremadamente importante para los illuminati. Los illuminati de Baviera quedaron oficialmente formados como orden precisamente un 1 de mayo. Ese día también se requiere para los satanistas sacrificio humano.
El artículo y sus referencias nos recuerdan la importancia extrema del número 11 y sus múltiplos 22, 33 así como cifras tales como 111, 222 y 333.
La actual invasión aliada en Libia, por medio de una campaña llamada “Odisea del Amanecer” fue aprobada tras la cumbre de París por 22 países, así que no vale preguntarse por qué no estaba Zapatero en esa cumbre. Sencillamente, tenían que ser 22 y no 23 porque así estaba diseñado para el éxito total de la operación.
Estimo muy probable que los números que alimentarán las acciones en Libia en lo sucesivo estén marcados exactamente por las mismas consideraciones. Por más que se empeñen en que evitemos los paralelismos entre esta acción de invasión y la de Irak, la evidencia está ahí fuera. En Irak se justificó la acción en base a a Resolución 1441 de la ONU. En Libia, se apoyan en la resolución de 1974.
Como en el caso de Irak, en España, no se ha pedido autorización de Las Cortes para enviar tropas y equipos militares a Libia.
Sin duda, el petróleo tiene mucho que ver en esta acción. Poner los recursos petrolíferos en manos de la Cábala y apretar un poco más la soga que tiene esta civilización alrededor de su cuello son objetivos fundamentales para pavimentar la llegada luminosa del que será presentado ante todos como el Nuevo Salvador.
Fuente original: Trinity a Tierra